Las personas pueden ser alérgicas a muchas cosas diferentes, como alimentos, moho, mascotas y polen. Todas las alergias tienen una cosa en común: el sistema inmunitario del cuerpo considera que el alérgeno es dañino. Esto estimula una respuesta inmunitaria alérgica que puede provocar una variedad de síntomas que incluyen tos, dificultad para respirar, picazón en los ojos, sarpullido, secreción nasal y estornudos.
Concretamente, el sistema inmunitario produce anticuerpos cuando el organismo entra en contacto con el alérgeno. Esto permite combatir las sustancias dañinas, por lo que la próxima vez que el cuerpo se encuentre con el alérgeno, se liberan histaminas, lo que desencadenará la reacción y los síntomas alérgicos.
Una estrategia común para disminuir los síntomas de la alergia es tomar antihistamínicos. Debes saber que los antihistamínicos de venta libre y recetados pueden provocar ciertos efectos secundarios (somnolencia, fatiga, dolores de cabeza, insomnio, náuseas o erupciones cutáneas). Sin embargo, existen algunos suplementos dietéticos para las alergias que pueden ayudar a aliviar los síntomas en las personas alérgicas, con menos riesgos.
Alimentos y complementos para las alergias
Algunas hierbas, nutrientes e incluso alimentos pueden ayudar a reducir los síntomas de la alergia, estos son algunos de los ejemplos y alternativas naturales:
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Nutrientes
La bromelina es una enzima proteolítica que se encuentra en todas las partes de la piña y ha demostrado tener efectos antiasmáticos, antiinflamatorios e inmunomoduladores. Se trata de un componente que tiene la capacidad de reducir la producción de mucosidad y la inflamación nasal al tiempo que mejora el drenaje.
Por su parte, la quercetina es un potente polifenol flavonoide que puede inhibir la producción de histamina. Asimismo, actúa como mediador proinflamatorio. La quercetina se ha estudiado ampliamente y se ha probado su eficacia para mejorar la mayoría de las enfermedades alérgicas, especialmente si hay inflamación de la membrana mucosa en las fosas nasales.
La vitamina D es liposoluble, por lo que ayuda a regular la función inmunológica. La deficiencia de este nutriente está relacionada con el asma, la congestión nasal alérgica, la anafilaxia y el eccema. Un ensayo aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo (en el año 2019) demostró que la suplementación con vitamina D junto con medicamentos para la alergia mejoraron los síntomas en personas con deficiencia de esta vitamina. De cara a otro estudio, también en el año 2019, se demostró que las personas que recibieron vacunas contra la alergia tuvieron mejores resultados en el tratamiento si tenían niveles óptimos de vitamina D.
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Plantas
En primer lugar, el astrágalo es una planta popular utilizada en la medicina tradicional china. Un ensayo doble ciego controlado con placebo de 2010 demostró que esta planta tenía la capacidad de mejorar los síntomas y la calidad de vida en personas con rinitis alérgica estacional (fiebre del heno).
Por otro lado, el extracto botánico denominado Butterbur (petasita) se usa generalmente para tratar las migrañas. Así mismo, la investigación ha mostrado que puede disminuir las histaminas y aliviar los síntomas de la rinitis alérgica.
Son conocidas las propiedades antiinflamatorias del jengibre, pero también puede ayudar a aliviar los síntomas de la alergia. Según la investigación, llevada a cabo en 2020, se encontró que el extracto de jengibre era tan efectivo como el medicamento loratadina, sin los efectos secundarios de este último. Por lo tanto, el jengibre puede ser ideal para mejorar los síntomas nasales y la calidad de vida en pacientes con rinitis alérgica. Los investigadores señalan que los efectos secundarios de la loratadina incluyen somnolencia, fatiga, mareos y estreñimiento.
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Alimento
Una dieta saludable y equilibrada también puede incluir alimentos que contengan las hierbas y los nutrientes mencionados anteriormente. Por ejemplo, la piña por su contenido de bromelina, las manzanas (ricas en quercetina) u otras frutas cítricas, bayas oscuras, ajo y cebollas.
Los alimentos ricos en vitamina C también pueden ayudar a reducir los síntomas. Un estudio de 2013 que involucró a niños con rinitis alérgica mostró que el grupo con un mayor consumo de alimentos ricos en vitamina C tenía muchos menos síntomas que aquellos con cantidades más bajas de alimentos con este ingrediente en su dieta. Cabe destacar que muchas frutas y verduras tienen un alto contenido de vitamina C (pimientos, brócoli, coliflor, cítricos, kiwi, fresas o tomates).
Por último, la investigación también muestra que una dieta rica en ácidos grasos omega-3 puede ayudar a disminuir el riesgo de alergias. Los alimentos ricos en este componente natural incluyen pescados grasos de agua fría (salmón, caballa, atún, arenque y sardinas) o incluso frutos secos y semillas (nueces, chía, lino, etc.).
Conclusión
En resumen, varias hierbas, nutrientes y alimentos, como la vitamina D, la vitamina C, el astrágalo y el jengibre pueden ayudar a aliviar los síntomas de las personas que padecen síntomas de alergia. Es recomendable consultar, en primer lugar, con tu proveedor de atención médica integradora. Un profesional podrá orientarte personalmente acerca de los suplementos para las alergias adaptados a tus necesidades.
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