Un ensayo clínico dirigido por el Center for Eye Research de Australia ha demostrado que el uso de suplementos de vitamina B3 (nicotinamida) ofrece resultados prometedores para quienes padecen glaucoma. Se trata de la principal causa de ceguera irreversible en todo el mundo, que se caracteriza por una disfunción gradual y la pérdida de las células ganglionares de la retina y sus axones que forman el nervio óptico.
El glaucoma es una enfermedad que tiene una variedad de factores de riesgo, que incluyen la edad, la genética y la presión intraocular (PIO) elevada. Sin embargo, las estrategias de tratamiento clínicamente disponibles se dirigen solo a la reducción de la PIO y no abordan directamente los eventos neurodegenerativos a nivel de la retina y el nervio óptico.
El papel de la vitamina B3 en la salud ocular
La vitamina B3, también conocida como nicotinamida, es un precursor de NAD + (dinucleótido de nicotinamida y adenina). Es una coenzima crítica que se encuentra en todas las células del cuerpo, por lo que esta vitamina interviene en cientos de procesos metabólicos. Trabajos recientes han indicado que los pacientes con glaucoma tienen niveles bajos de NAD + en suero.
Mientras que las células ganglionares de la retina soportan un estrés metabólico significativo en el glaucoma, pero mantienen la capacidad de recuperar la función, la suplementación con B3 proporciona una protección sólida de las células ganglionares de la retina en modelos preclínicos. En cambio, se desconoce el potencial de la nicotinamida en el glaucoma humano.
Suplementos a base de vitamina B3
Los investigadores del Center for Eye Research Australia (CERA) llevaron a cabo una investigación intervencionista. El objetivo fue determinar si las mejoras funcionales observadas con la suplementación en ratones podrían reproducirse en humanos con glaucoma. Para ello, el equipo de investigación llevó a cabo un estudio intervencionista.
El nuevo estudio, publicado en Clinical and Experimental Ophthalmology, encontró resultados prometedores en la función visual de los pacientes con glaucoma que recibieron una dosis alta diaria de 3 gramos de B3 durante 12 semanas. Esta suplementación estuvo acompañada por un tratamiento regular para reducir la presión ocular.
En resumen, según la investigación, la la suplementación con vitamina B3 ayuda a proteger contra el daño de las células nerviosas que conduce a la ceguera en el glaucoma. El ensayo fue dirigido por el profesor Jonathan Crowston y la Dra. Flora Hui en el Center for Eye Research Australia. El estudio también incluyó a investigadores de la Universidad de Melbourne, Duke NUS-Medical School, Singapore Eye Research Institute, Karolinska Institutet, University of Adelaide y Cambridge University. Cabe señalar que las pruebas se realizaron en pacientes con glaucoma en Melbourne en clínicas oftálmicas privadas y en el Royal Victorian Eye.
Detalles de la investigación
Durante el transcurso del estudio, 57 pacientes con glaucoma recibieron tanto placebo como vitamina B3. Los participantes se sometieron a 6 semanas de 1,5 g/día y luego 6 semanas de 3 g/día. Todos los participantes fueron vistos al inicio del estudio y revisados durante visitas cada seis semanas. En cada visita, los participantes se sometieron a un examen clínico estándar, que incluía la medición de la agudeza visual, la PIO, la presión arterial y el examen con lámpara de hendidura.
Para determinar la función visual de los pacientes, los investigadores utilizaron una prueba de diagnóstico que mide la actividad eléctrica en las células de la retina llamada electrorretinografía. Además, monitorearon cualquier cambio mediante pruebas de campo visual.
De cara a los resultados, se ha encontrado “una mejora significativa en la función visual de los pacientes con glaucoma que recibieron una dosis alta diaria de 3 gramos de B3 durante 12 semanas”, además de su tratamiento regular para reducir la presión ocular. En algunos, la vitamina B3 en dosis altas mejoró en gran medida el funcionamiento de las células nerviosas en el ojo.
Conclusiones y recomendaciones
El estudio ha demostrado por primera vez, que las altas dosis diarias de vitamina B3 pueden conducir a mejoras tempranas y significativas en pacientes que están recibiendo tratamientos tradicionales para reducir la presión ocular. En definitiva, se trata de una vitamina que podría usarse para proteger las células del daño oxidativo y ayudar a que las que han sido afectadas por glaucoma funcionen mejor.
Los autores del estudio creen que debería haber un ensayo internacional más grande para determinar si la mejora mostrada podría mantenerse a más largo plazo para reducir la progresión del glaucoma. El profesor Jonathan Crowston, quien dirigió el estudio, está de acuerdo con esta afirmación.
Asimismo, Crowston ha señalado que “un estudio a más largo plazo podría determinar de manera concluyente si la nicotinamida retrasa la progresión del glaucoma más que usar la reducción de la presión ocular tan solo con medicamentos”. Por lo tanto, el profesor asegura que esto ayudará a determinar si los pacientes con glaucoma deben tomar vitamina B3 de forma continua.
Para terminar, investigaciones preclínicas anteriores en los Estados Unidos encontraron que la vitamina B3 podría prevenir la degeneración del nervio óptico, pero esta es la primera vez que se han observado resultados similares en un ensayo en humanos. Por ello, para evaluar si estas mejoras pueden ayudar a reducir la progresión de la enfermedad durante un período de tiempo más largo, actualmente se está diseñando un ensayo más grande.
Referencias
Hui F, Tang J, Williams PA, McGuinness MB, Hadoux X, Casson RJ, Coote M, Trounce IA, Martin KR, van Wijngaarden P, Crowston JG. Improvement in inner retinal function in glaucoma with nicotinamide (vitamin B3) supplementation: A crossover randomized clinical trial. Clin Exp Ophthalmol. 2020 Sep;48(7):903-914.