El embarazo presenta muchos desafíos únicos que van desde mayores necesidades nutricionales hasta náuseas y vómitos. Los suplementos para embarazadas pueden ser útiles para satisfacer las necesidades de las mujeres durante esta etapa.
Un buen suplemento prenatal contiene cantidades adecuadas de nutrientes clave para apoyar el crecimiento y desarrollo del bebé y las necesidades de la persona embarazada.
Suplementos para un embarazo saludable
A continuación, enumeramos algunos suplementos clave que las mujeres embarazadas deben considerar:
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Multivitamínico prenatal
Un suplemento de este tipo puede ser fundamental durante el embarazo y también durante el período preconcepcional (al menos un mes antes de concebir). Las pautas generales para las multivitaminas prenatales recomiendan que las fórmulas contengan ciertos nutrientes, como ácido fólico, vitamina D, yodo, hierro, vitamina B6 y vitamina B12. Los analizamos a continuación:
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Ácido fólico
La mayoría de las organizaciones y asociaciones profesionales recomiendan a todas las mujeres en edad reproductiva que obtengan al menos 400 mcg de folato al día, independientemente de si están planeando quedarse embarazadas. El ácido fólico, la forma sintética del folato, se agrega comúnmente a los multivitamínicos prenatales y se considera una de las vitaminas más importantes durante esta etapa. Esto se debe en gran medida a su capacidad para reducir el riesgo de defectos del tubo neural.
Una revisión sistemática y un metaanálisis que examinaron la suplementación con ácido fólico durante el embarazo concluyeron que este nutriente se asocia con un impacto positivo en los resultados del desarrollo neurológico. Además, según estos estudios, el ácido fólico podría ayudar a mejorar el desarrollo intelectual y reducir el riesgo reducido de rasgos de autismo, trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) o problemas de lenguaje.
Es importante tener en cuenta la diferencia entre los términos ácido fólico y folato. El primero es la forma sintética del folato; mientras que el segundo es la forma natural que se encuentra en alimentos como el hígado de res, espinacas y espárragos. Así las cosas, cabe señalar que la mayoría de los alimentos y suplementos enriquecidos contienen ácido fólico, una forma que no es adecuada para todas las personas. Esto se debe a que algunas personas son portadoras de una mutación del gen MTHFR, que afecta su capacidad para utilizar el ácido fólico. Estos pacientes deberían considerar tomar una vitamina prenatal diaria que contenga 5-MTHF, la forma metilada de folato.
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Vitamina B12
Al igual que el ácido fólico, la vitamina B12 desempeña un papel importante en la reducción del riesgo de defectos del tubo neural, retrasos en el desarrollo y anemia en los bebés. Por lo tanto, los suplementos a base de vitamina B12 o un multivitamínico prenatal que contenga vitamina B12 durante la fase previa a la concepción y el embarazo puede ayudar a reducir el riesgo de niveles bajos de B12.
Concretamente, los autores de un estudio recomendaron que los niveles de vitamina B12 antes de la concepción sean superiores a 221 pmol/L (300 ng/L) para reducir el riesgo de defectos neuronales.
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Yodo
Se trata de un oligoelemento que se agrega comúnmente a los suplementos prenatales. Las mujeres suelen necesitar yodo adicional durante el embarazo y algunas pacientes pueden correr riesgo de sufrir deficiencia de este mineral, especialmente si evitan alimentos lácteos, el pescado y los mariscos.
En este sentido, una revisión señaló que la suplementación con yodo durante el embarazo redujo significativamente el riesgo de hipertiroidismo posparto en un 68%.
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Hierro
El aumento del volumen sanguíneo que se produce durante el embarazo puede contribuir a un nivel bajo de hierro. Muchas vitaminas prenatales contienen hierro para satisfacer la mayor demanda de este nutriente durante el embarazo.
Según una revisión de 2015, la administración preventiva de suplementos de hierro redujo el riesgo de anemia materna a término en un 70%, la anemia por deficiencia de hierro a término en un 67% y la deficiencia de hierro a término en un 57%.
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Vitamina B6
Esta vitamina suele estar incluida en las fórmulas prenatales, aunque es probable que te la recomienden tomar por separado si estás embarazada. Se ha demostrado que la vitamina B6 ayuda a prevenir las náuseas y los vómitos, síntomas comunes que se experimentan las mujeres embarazadas.
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Vitamina D
Un estudio realizado a lo largo del año 2019 encontró que la suplementación con vitamina D durante el embarazo puede reducir el riesgo de preeclampsia en un 52%, diabetes gestacional en un 49%, bajo peso al nacer en un 45% y hemorragia posparto grave en un 32%.
Las recomendaciones de dosificación varían según el nivel de vitamina D. En personas con un nivel de esta vitamina inferior a 50 nmol/L, puede ser necesaria vitamina D adicional más allá de la disponible en un multivitamínico prenatal.
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Ácidos grasos omega-3
Los suplementos de ácidos grasos omega-3, que contienen una combinación de EPA y DHA, contribuyen al desarrollo cognitivo infantil en condiciones normales. Un metaanálisis reciente evaluó los beneficios de tomar ácidos grasos omega-3 durante el embarazo y llegó a la conclusión de que los omega-3 redujeron el riesgo de parto prematuro (menos de 37 semanas) en un 11%, parto prematuro temprano (menos de 34 semanas) en un 42% y el bajo peso al nacer en un 10%.
A rasgos generales, las investigaciones respaldan las fórmulas a base de ácidos grasos omega-3 con mayores cantidades de DHA. Aun así, las vitaminas prenatales no suelen contener ácidos grasos omega-3 o los contienen en cantidades insuficientes, por lo que es necesario un suplemento separado de ácidos grasos omega-3 rico en EPA y DHA.
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Jengibre
Esta planta medicinal con múltiples beneficios no se suele encontrar en las fórmulas multivitamínicas prenatales. Sin embargo, la raíz de jengibre es una opción popular para las personas que experimentan náuseas y vómitos.
De hecho, una revisión sistemática que investigó en el año 2020 varios tratamientos de medicina alternativa para las náuseas y los vómitos durante el embarazo encontró que el jengibre y la vitamina B6 eran igualmente efectivos hasta por 60 días. Por el contrario, si lo vas a tomar por un período superior a dos meses, se ha descubierto que los efectos de la vitamina B6 son superiores a los del jengibre.
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Calcio
La mayoría de las vitaminas prenatales no contienen calcio o lo contienen en cantidades limitadas. Se pueden recomendar suplementos de calcio para la prevención de la preeclampsia, especialmente para personas con una ingesta dietética baja de este nutriente.
Sin ir más lejos, en una revisión de 2018, se encontró que el riesgo de parto prematuro era un 24% menor en personas que recibían suplementos de calcio en dosis altas. Asimismo, los suplementos ricos en calcio redujeron el riesgo de preeclampsia en un 55% en general y en un 64% en mujeres con dietas bajas en este mineral.
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Magnesio
Se ha demostrado que la suplementación con magnesio, en particular citrato de magnesio y aspartato de magnesio, se asocia con puntuaciones de Apgar más altas en los recién nacidos y una probabilidad reducida de hospitalización en un 35 %.
Investigaciones adicionales sugieren que el magnesio puede ayudar a mejorar los calambres en las piernas durante el embarazo.
Conclusión
Es probable que las mujeres embarazadas necesiten apoyo adicional durante este importante período. Algunas puede que sufran síntomas como náuseas matutinas o necesiten ayuda para satisfacer sus mayores necesidades dietéticas durante el embarazo.
Para ello, hay ciertos suplementos que pueden servir de ayuda, muchos de ellos los hemos mencionado en este artículo y los puedes encontrar en tu herbolario de confianza en forma de suplementos. Algunas veces se presentarán por separado y otras incluidos en las fórmulas prenatales o indicadas para mujeres embarazadas.
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